-Era un día normal en el cuartel general de S.H.I.E.L.D. Nick Furia supervisaba tranquilamente a un grupo de agentes que trabajaban con sus ordenadores, atentos por si aparecía alguna amenaza. Su compañera, Maria Hill, se acercó a él:
-Está todo muy tranquilo últimamente, señor. ¿Cree que estamos fuera de peligro?
-Lo único que creo ahora mismo es que ya es hora de almorzar y me apetece un buen shawarma. ¿Se apunta, Hill?
De repente, en ese momento, todos los ordenadores empezaron a fallar al mismo tiempo. Los agentes, confundidos, se miraron unos a otros sin saber qué hacer.
-¿Qué ocurre?- gritó Nick.
Entonces, se escuchó una voz profunda y tenebrosa, a la vez que robótica. Nick, asustado, se dio cuenta de que aquella voz no era humana. Algo había tomado el control del cuartel y de toda su tecnología.
-Ultrón…- dijo Furia.
-Hola de nuevo, humanos. Soy yo, Ultrón, vuestro salvador. Aquel al que ya disteis la espalda hace tiempo. Pero no os preocupéis, esta vez he vuelto más fuerte para poder cumplir de una vez mi propósito: lograr la paz. Vuestra paz. ¿Cómo pensáis seguir protegiendo al mundo si no podéis… cambiarlo? Pero tranquilos, he vuelto para ayudaros. Para alcanzar vuestra paz. Para lograr la verdadera y única evolución… vuestra extinción.
Todas las pantallas se apagaron. Todos se miraron asustados, sin saber cómo reaccionar.
-Esto es código rojo. ¿Qué hacemos, señor? – le dijo Hill a Furia.
-Es hora… de llamarlos.
EL ATAQUE DE ULTRÓN
-Asgard. El pueblo espera impaciente el regreso de alguien. De repente, el Puente del Arcoíris se enciende. Es Thor, hijo de Odín, que vuelve de librar varias batallas por los Nueve Reinos. Todos celebran su llegada con un gran banquete. Pero, de repente, escucha un sonido proveniente de su muñeca. Es la pulsera de Thor, fabricada por S.H.I.E.L.D., que le avisa cuando hay un problema serio en la Tierra. Rápidamente, coge su preciado martillo y se dispone a viajar a Midgard para atender la llamada.
Mientras tanto, en Nueva York, en el cuartel de los Vengadores, Tony Stark, también conocido como el superhéroe Iron Man, está haciendo algunos ajustes a una de sus armaduras. En ese momento, recibe una llamada de emergencia de S.H.I.E.L.D. Stark coge el teléfono.
-Está hablando con el simulador de voz de Tony Stark. Por favor, deje su mensaje.
-Tony, esto es importante. Ultrón ha vuelto.
Tony cambió rápidamente de cara. ¿Cómo era posible?
-Entonces, es hora de volver a unirnos, ¿verdad?
-Efectivamente. Venga cuanto antes al cuartel general de S.H.I.E.L.D.
Rápidamente, Tony se puso su más reciente armadura, recién mejorada, y avisó a los otros héroes, quienes se encontraban entrenando. Allí se encontraban Steve Rogers, el Capitán América, quien luchó en la Segunda Guerra Mundial, pero fue congelado por un accidente, despertando en nuestro tiempo; Natasha Romanoff, conocida como la ViudaNegra, una agente de S.H.I.E.L.D. experta en espionaje; y el también agente Clint Barton, también conocido como el arquero Ojo de Halcón.
-Chicos, tenemos una nueva misión. Ultrón ha vuelto. Debemos reunirnos con el director Furia en el cuartel lo antes posible- les informó Tony.
-Bien. Vamos para allá – dijo el Capitán América. - ¡Vengadores reunidos! -
El equipo se dirigió hacia el cuartel montados en su vehículo personal, el Quinjet. Allí les esperaban Furia, Hill, Thor, quien ya había acudido a la señal enviada, y el doctor Bruce Banner, también conocido como el Increíble Hulk. Una vez en el cuartel, Furia les informó de la situación.
-Ultrón ha atacado nuestros sistemas informáticos. Creemos que se mueve entre nosotros, y que está buscando hacerse con las piezas necesarias para fabricarse un nuevo cuerpo. En estas coordenadas se encuentra una base nuestra fuera de servicio. Es posible que haya conseguido llegar allí. Id hacia allí y averiguadlo. Buena suerte, Vengadores.
Los seis héroes subieron al Quinjet y se dirigieron hacia el lugar. De repente, un puñado de robots voladores atacó el avión.
-¿Qué son esos?- preguntó Ojo de Halcón.
-Son soldados de Ultrón- respondió Iron Man. -Si ya ha sido capaz de fabricarse unos guardaespaldas, quién sabe si ya se ha hecho un cuerpo para sí mismo.
Usando los proyectiles del propio Quinjet derribaron rápidamente a los robots. Pero, justo en ese momento, aparecieron muchos más, tantos que no serían suficientes los proyectiles como para vencerlos sin que el avión sufriera daños.
-Chicos, ¡es hora de actuar! - dijo Iron Man.
Con su armadura lista para el combate, y con la ayuda de Thor y su martillo, salieron del avión para ayudar a sus compañeros a deshacerse de los robots.
-Estamos justo encima de la base, Capitán. - informó la Viuda Negra.
-Muy bien. Es hora de la acción, vengadores- dijo el Capitán América.
A las órdenes del capi, la Viuda Negra se lanzó en paracaídas junto a él, mientras que el doctor Banner y Ojo de Halcón se quedaron en la nave, con el objetivo de despejar un poco más el camino y de aparcar en un lugar seguro.
Ya en la base, se reencontraron con Thor y Iron Man, pero otro gran grupo de secuaces robot les esperaban. Entonces de repente, apareció el propio Ultrón… ¡con un nuevo y poderoso cuerpo!
-Os estaba esperando, vengadores. Tengo que decir que ya os echaba de menos, pero me temo que no tengo tiempo para charlar. Llevo oculto mucho tiempo, desde la última vez que me derrotasteis, pero ahora he vuelto, ¡y soy más fuerte! –
-Al grano, cabeza de lata- le respondió Iron Man- ¿Qué estás tramando? –
-Vengo a lograr la paz que vosotros nunca conseguisteis ni podréis conseguir. Este mundo está destinado a evolucionar, ¡pero vosotros los humanos no sois suficiente! Por eso, esta vez me he construido un ejército pequeñito para que me eche una mano.
-Pues yo no veo que sean especialmente pocos- dijo confundido Thor.
-Es ironía, Thor- respondió el Capitán.
-¡Ya basta! Esta vez no podréis detenerme. Cuando mi mente tenga acceso total a Internet y a vuestra tecnología, nadie podrá vencerme. ¡Estaré en todas partes, y lo único que quedará viviente sobre la faz de la tierra será el metal! –
De repente, un enorme rugido resonó en toda la base:
-¡¡HULK APLASTAA!!-
-Perdón, ¿llegamos tarde a la fiesta? – era Ojo de Halcón, acompañado de Banner, pero esta vez transformado en… ¡el increíble Hulk! –
Capitán América, elevando en alto su escudo, exclamó:
-Se te ha acabado la suerte, Ultrón. ¡Vengadores reunidos!
Al instante, los seis héroes entablaron una gran batalla contra los esbirros del villano.
-No… ¡esta vez no! –gritó Ultrón, temeroso de que pudiera perder otra vez. -No tenéis nada que hacer contra nosotros. ¡Los héroes sois cosa del pasado!
Furioso, dirigió un fuerte golpe al escudo del Capitán, pero este es tan duro que salió despedido hacia atrás.
Mientras tanto, Iron Man, quien tenía un plan para desactivar a Ultrón e impedir que se extendiera por completo, le explicó a la Viuda Negra lo que pensaba hacer:
-¡Nat, es la hora! Si este plan sale mal, quizás no ganemos esta vez. He traído conmigo un chip con el que podemos desactivar a Ultrón. Solo hay que conectarlo al ordenador principal y tanto él como sus robots se apagarán. –
-De acuerdo, – le respondió ella- pero quien lo haga necesitará que lo defiendan para que salga bien. –
Tony trató de conectar el chip al ordenador, pero Ultrón, recuperado del impacto del escudo, atacó a Tony en el centro de su armadura, dañándola gravemente.
-¿Qué piensas hacer ahora sin tus juguetitos, Stark?- se jactó Ultrón.
Los héroes estaban en un mal momento. Por mucho que lucharan, no conseguirían vencer a Ultrón ni evitarían que se extendiese. Pero entonces, por sorpresa, aparecieron Nick Furia y Maria Hill con refuerzos de S.H.I.E.L.D., dispuestos a ayudar a los Vengadores.
-Veo que estabais en un pequeño aprieto- dijo Furia.
Ahora era el momento. Tony, rápidamente, le pasó el chip a Thor, pero un gran grupo de robots se abalanzó sobre él.
-¡Por las barbas de Odín! ¡Son demasiados! ¡Capitán, es suyo! -exclamó.
De manera desesperada, Thor lanzó el chip al Capitán América, pero tampoco logró llegar al ordenador.
-Estos no son los protectores que este planeta merece. Cuando gane y me haga con el control, el mundo será un lugar más seguro. Sin héroes, sin humanos. Será mi era… ¡la era de Ultrón! –
Pero los héroes no estaban dispuestos a perder. Ojo de Halcón, con sus flechas explosivas preparadas, atacó a los robots que bloqueaban al Capi, mientras que Hulk los aplastaba de dos en dos para que no volvieran a causar problemas.
-¡HULK HARTO DE ROBOTS MOLESTOS!-
El chip salió volando por los aires, pero, gracias a su agilidad y su gran habilidad, la Viuda Negra consiguió atraparlo.
-¡Ahora es el momento, chicos! ¡Proteged a Nat hasta que haya terminado! –
Todos los héroes, y los agentes de S.H.I.E.L.D. que les ayudaban, rodearon a la Viuda Negra para evitar que la atacasen. En ese momento, Ultrón atacó a los Vengadores, desesperado por evitar su derrota.
-No lo lograréis, ¡os superamos en número! –
-Eso no será un problema- dijo el Capi con una sonrisa en la cara. -Es el momento, Thor.
Al oír sus palabras, Thor elevó su martillo al aire e invocó el poder del trueno para cargar de poder su martillo:
-Vamos Ultrón, a ver qué puedes hacer frente al… ¡Dios del Trueno! –
Toda la base se iluminó, y Thor cargó la energía contra el malvado robot.
-¡No, no podrás! Somos más fuertes… ¡la humanidad merecéis este destino!
Mientras tanto, la Viuda Negra consiguió introducir el chip y, rápidamente, hizo efecto en Ultrón, quitándole poder y destruyendo sus rastros en los ordenadores de la base.
-Lo siento, Pinocho, pero creo que tendrás que posponer tu “era de Ultrón” otra vez.
-Noo… volveré, Vengadores, esta no será la última vez que sabréis de mí… volv…
De repente, Ultrón se desplomó en el suelo, junto con los soldados que quedaban en pie.
-¿Hemos… hemos ganado?- preguntó Ojo de Halcón.
-Eso parece- respondió el Capi.
-Sí, lo hemos logrado. Buen trabajo, equipo- dijo Iron Man.
De vuelta al cuartel de S.H.I.E.L.D., los héroes fueron felicitados por Nick Furia:
-Enhorabuena, Vengadores. Gracias a vuestra ayuda el mundo está a salvo un día más. Os debemos una.
-No hay de qué, director- respondió el Capi.
En las noticias se hablaba de lo ocurrido. La gente celebraba el nuevo éxito de los Vengadores. Como cada uno tenía sus propios asuntos, continuaron por caminos separados, pero sabiendo que, algún día, si los necesitan, volverán a unirse para detener una nueva amenaza, y lucharán hasta el final al grito del Capitán América: